Últimamente se ha convertido en tradición en el fin de semana posterior a la Virgen de Aldeavieja, una caldereta que financiada por el Ayuntamiento y cocinada por la Asociación de Amas de Casa de Navalmoral, reune a los habitantes y forasteros en torno a la Plaza Grande, donde se degusta la ya famosa caldereta acompañada con una buena jarra de vino tinto de la tierra y un pan de hogaza.

Después de cenar y de que cada familia recoja sus mesas y sus platos, la gente se va colocando con sus sillas alrededor del escenario puesto en la plaza grande donde suele haber alguna actuación, teatro o grupo de música, que ameniza la sobremesa.

Otra nueva tradición que también se celebra desde hace tres inviernos, es la jornada micológica. Vienen al pueblo unos expertos en la materia y a primera hora de la mañana dan una charla informativa de como deben cogerse las setas, qué tipo hay en la zona, las zonas donde más se dan, etc, etc...

Mientras los aficionados a la micología buscan las setas, níscalos, champiñones, senderuelas... algunas mujeres van preparando la comida, que suele consistir en arroz con setas o fideuá con setas, pan y vino.

Si hace buen tiempo, la comida y los comensales se que quedan en la calle, en caso de hacer frío se abren las escuelas para que la gente pueda degustar la gastronomía de ese día.